oh my pastel blog

¡Hola!

 Sí, ejem, saltémonos la parte donde me justifico por mi ausencia estos últimos meses en el blog. Como sabéis, llevo adelante la tienda, el canal de YouTube, la cuenta de Instagram y, ahora también, las comisiones de ilustraciones. No me da tiempo a tanto hobby 😅

 Este post me encanta hacerlo año tras año para hacer un resumen de mis lecturas durante los últimos 12 meses, destacar los autores que he conocido y las novelas que me han atrapado. ¡Empezamos!

 Normalmente alterno varias lecturas al mismo tiempo, según la hora del día. Esto puede parecer raro de primeras, pero tiene una explicación (que ya os conté en otra entrada): amo las novelas de terror y crímenes, pero a mi mente no le gusta consumirlas antes de dormir o me regala una sesión doble de pesadillas psicodélicas. Es por esto que reservo este tipo de literatura para otros momentos del día y por la noche escojo lecturas más livianas o más tranquilitas (sin asesinos maquiavélicos de por medio).

 Al inicio del año, todavía en Navidad, decidí devorar dos libros que me encantan pero no releía desde la infancia: "La historia interminable" y "Momo". Ambos son clásicos indiscutibles y si no los has leído, te los recomiendo encarecidamente. Supuestamente son dos libros orientados a un público juvenil, infantil incluso, pero tienen un trasfondo maravilloso y párrafos y párrafos por subrayar y no olvidar nunca.

 Otras novelas que leí en el primer trimestre del año fueron:

- Submarine, de Joe Dunthorne: había visto la película previamente, en mi adolescencia, cuando me enteré de que mi crush en aquel momento (Alex Turner) había compuesto cinco canciones para la película. Después supe que estaba basada en una novela y, en fin, no puedo describiros mi ilusión cuando pasa algo así: soy una AMANTE de leer toda novela cuya película haya visto previamente. No puedo evitarlo. Es una lectura ligera, aunque no apta para todos los públicos. El protagonista es peculiar, como mínimo, y su adolescencia lo eleva al cubo.

- El festín de la vida, J. Ryan Stradal: esta novela la leí por pura casualidad, como me suele ocurrir habitualmente. Mi iPad está repleto de ebooks que se acumulan unos sobre otros, esperando ser los elegidos (cual aliens del Pizza Planet), y muchas veces mi criterio es tan básico como guiarme por el título y la portada. Me gustó mucho, aunque tiene un ritmo distinto a lo que estoy acostumbrada a leer. Durante la novela deja muchos finales abiertos (de distintos personajes) y eso puede que te desconcierte o te atrape y te mantenga enganchada. Tiene tintes dramáticos y yo suelo huir de ese tipo de lecturas, pero se lo perdoné porque el hilo conductor de la novela es la cocina y la comida.

- Cometas en el cielo, Khaled Hosseini: os decía más arriba que suelo huir del drama, pero en ocasiones me tiro a la piscina premeditadamente. En este caso, fue una recomendación de mi amiga lectora Elena (@melituca). Esta novela se me asemejaba a "El dios de las pequeñas cosas", así que me decidí a leerla y sólo puedo decir que es preciosa, aunque DESGARRADORA. Avisad@s estáis. (Dato random: en este caso todavía no he visto la película).

- ¿Quién quiere ser millonario?, Vikas Swarup: siguiendo la línea de la novela anterior, me decidí a leer esta, puesto que sí he visto varias veces "Slumdog Millonaire". Me gustó mucho leer la historia, pese a que también es un drama y necesitarás pañuelos a mano para cuando se desborden tus lágrimas.

- Fahrenheit 451, Ray Bradbury: otro de mis géneros favoritos son las distopías y la ciencia ficción. Ya he leído bastantes y se me van agotando poco a poco, espero encontrar algún título jugoso para este 2020. En este caso leí esta novela imprescindible y me gustó mucho. Totalmente recomendada, porque une el concepto de la distopía con el poder de la literatura, así que se catapultó directamente a mis favoritos del año.

 Con la llegada de la primavera me pasé a los libros en físico y me leí casi todas las novelas de María Dueñas. Empecé con Las hijas del capitán, novela que me sorprendió y me consiguió visualizar el contexto histórico en el que está basada. La trama en algunos puntos podía ser predecible, pero fue una lectura que disfruté mucho y perfecta para el final del día, donde buscas una novela que te relaje y te distraiga. Después leí El tiempo entre costuras, cuya serie no he visto. Normalmente huyo de los best-sellers pero a veces los elijo por decisión propia y me sorprenden. Me gustó mucho la trama y os la recomiendo si queréis salir de un bloqueo lector. Y por último leí Misión Olvido, la más rápida de leer y más liviana, en mi opinión. Me gustó mucho también y cumplió su función con creces.

 Tras unos meses centrándome más en leer manga, empecé el verano leyendo a Elizabeth Gilbert, autora que me encanta desde que la descubrí con Come, reza, ama. En este caso leí La firma de todas las cosas, novela kilométrica en epub (1000 y pico páginas). Era muy distinta a lo que había leído previamente de su trabajo, por lo que me mantuvo entretenida todo el rato. Parece que va a ser una novela densa en sus primeros capítulos, pero conforme avanzas te sumerges en la historia y sientes que conoces a la protagonista en directo y has vivido todas sus peripecias.

 En verano también releí una novela que en su momento no me gustó nada: El amante japonés, Isabel Allende. En su momento no me gustó por las expectativas que tenía. Compré el libro pensando que estaba ambientado en Japón y la trama se desarrollaría allí. Error. Eso me condicionó y no pude apreciar todo el significado de esta historia. Sin embargo, le di otra oportunidad y me gustó mucho, sobre todo la calma y la naturalidad con la que tratan el tema de la vejez y de la muerte cuando has vivido una vida plena.

 Y siguiendo con el verano y novelas que me evadiesen de los 42 grados de mi ciudad, escogí El jardín olvidado, Kate Morton. De esta autora ya había leído varios de sus libros y siempre me han gustado mucho, ya que me traslada automáticamente a los pueblecitos, paisajes y localizaciones de los que habla. Consigue distraerme y las tramas me mantienen en vilo hasta el final, por más que intente adivinar qué va a pasar. Esta en concreto se ha convertido en mi favorita de la autora.

 Para acabar con el calor estival, me atreví a leer la trilogía de Jenny Han (A todos los chicos de los que me enamoré, PS. I still love you y Always and forever, Lara Jean). He de decir, por más que me vaya a ganar el odio de alguna seguidora, que la película de Netflix no me gustó, se me hizo eterna. Sin embargo, las novelas consiguieron distraerme y meterme en la historia. Lara Jean me parecía entrañable en algunos momentos, en otros sólo podía pensar en los dramas que se monta siendo una adolescente aparentemente rica de Estados Unidos. O será que ya tengo cierta edad y me cuesta empatizar con ciertos comportamientos en este tipo de novelas, no lo descarto. Como dato random os contaré que me fijé en qué comían y cocinaban durante las tres novelas y deben nombrar una comida sana en toda la trilogía xD

 Pasando al otoño, empezamos con La villa de las telas, Anne Jacobs. Le di 2 estrellas en Goodreads, no sé si eso me convierte en una cínica. Es predecible hasta decir basta, no te sumerges en el contexto histórico y los personajes femeninos son para llorar (la típica chica con kilos de más, acomplejada, que no tiene nada que aportar porque su vida gira en torno a su peso, y eso la convierte en mezquina... NEXT). También leí Violet y Finch, Jennifer Niven (novela que pensé que seguía la línea de Rainbow Rowell, autora que amo, y de repente todo tomó un curso dramático y que me dejó con malestar en el cuerpo por días) y La dependienta, Sayaka Murata (lectura ligera, rápida y corta; ambientada en Japón y cuya protagonista está como un cencerro, aparentemente). También escogí esta fecha para releer Alicia en el país de las Maravillas, Lewis Carroll.

 Pero, sin duda, mi mayor descubrimiento otoñal fue Papel y tinta, de María Reig. Me recordó en según que cosas a "El tiempo entre costuras" así que si te gustó esa novela, tienes que leer esta historia. La trama gira en torno a Elisa, joven que quiere ser periodista y escritora, pero su condición femenina se lo impide por el momento histórico en el que vive. Os la recomiendo si os apetece salir de un bloqueo lector, es extensa pero de lectura amena.

 Y así llegamos al último trimestre del año, empezando Noviembre con un libro que escogí por su título: El noviembre de Kate, Mónica Gutiérrez. Gracias a su autora descubrí el concepto de novela feel-good, lo que ya venía oliéndome desde hace años pero no sabía que existía un término concreto para definirlo. Como os comentaba más arriba: el tipo de novela que leerías antes de dormir, donde ya os adelanto que no hay asesinatos, ni giros locos en la trama, ni tecnología malvada que quiere controlar el transcurso de tu vida. La parte mala: es tan predecible que si no lo pillas en el momento adecuado, podría causar el efecto contrario.

 No os mentiré, a veces recurro a este tipo de lecturas de manera terapéutica, así que me devoré todos los libros de Mónica Gutiérrez en apenas un mes. Leí también Cuéntame una noctalia, Un hotel en ninguna parte y La librería del Señor Livingstone. Esta última me trajo muchos recuerdos de mi época viviendo en Londres y la disfruté como una enana.

 Para -casi- terminar, leí dos novelas de Rainbow Rowell, una de ellas era una relectura (Enlazados) y la otra era Segundas Oportunidades, novela que me encantó y me hizo creer un poquito más en el amor longevo y compasivo. Por otra parte, tras ver "Call me by your name" me decidí a leer el libro y me ENCANTÓ, os lo recomiendo totalmente. Me enamoré de la escritura de André Aciman y no tardaré en leer más de sus obras.

 Y para celebrar que el invierno había llegado, me atreví a empezar con la saga de Canción de hielo y fuego, zampándome Juego de Tronos pese al tamaño de la novela. Me lo voy a tomar con mucha calma porque todavía debe publicar el último, pero si estáis pensando en leerlo y no os atrevéis: no tengáis miedo, no es una lectura tediosa (sobre todo si has visto la serie), seguro que os gusta. En mi caso la novela está repleta de post-its con las diferencias respecto a la serie y estoy disfrutando de la experiencia como una enana.

 ¡Por fin acabamos! Me ha quedado una entrada eteeeeeeerna pero si eres una ratona de biblioteca como yo seguro que has disfrutado y has apuntado algún título para el 2020. Si te apetece, puedes compartir conmigo tus lecturas de 2019 o tus recomendaciones ^_^

 ¡¡¡Gracias por leerme!!! ¡Abrazote de Totoro!